ANALISIS VERANIEGO 2: ESCUDERIAS

Tras haber redactado y publicado mi opinión sobre todos los pilotos que conforman la parrilla de este 2019, en este artículo, que podría considerarse como una continuación del anterior, voy a realizar el mismo análisis, pero esta vez con las 10 escuderías como protagonistas. Sin mas dilación, comencemos con el análisis de lo que ha sido esta mitad de temporada para las distintas marcas:

     Williams: lamentable y triste la situación en la que se encuentra el equipo británico que en la década de los 90’ tocó el cielo de la Formula 1 con pilotos como Mansell, Prost, Villeneuve, … En la actualidad se arrastran por los circuitos son ninguna esperanza de salir del hoyo que se han cavado así mismos a lo largo de las últimas temporadas en las que progresivamente han ido involucionando hasta hoy en día. Los de Grove comenzaron con retraso la pretemporada porque el coche aún no estaba listo, además de cara a esta temporada perdieron a dos fuentes de ingreso importantes, como son Martini, y Lawrence Stroll, que vio mejor negocio en la ya extinta Force India. Partiendo de es base, el resto de la temporada está siendo aún peor que el pasado año y lo que es peor, la cosa no parece que vaya a mejorar.

A decir verdad, no hay mucho que comentar sobre la temporada de los de Claire Williams, sino más bien de como han pasado en cinco años de contar con uno de los monoplazas más potentes a ser con clara diferencia los últimos clasificados en cada gran premio; pero eso es otro tema y será comentado en otra ocasión.

      HAAS: en mi opinión la decepción y el desastre más estrepitoso en lo que a escuderías respectas de este año. La escudería estadounidense se ha precipitado desde la 5ª plaza en el campeonato de constructores de 2018, ha ser los penúltimos, por delante tan solo de Williams. Estamos acostumbrados a ver en este equipo como cada temporada, como sus pilotos, mecánicos y directivos y a ciencia cierta todo lo que rodea a HAAS; desperdician un envidiable monoplaza, que prácticamente heredan de la Scuderia Ferrari; es decir, tanto compañeros de profesión como aficionados nos tiramos de los pelos al ver los tristes resultados que cosechan pese a tener entre sus manos el mejor (o uno de los mejores) coches del “resto de la parrilla”. Sin embargo, la situación de este año es distinta, ya que siguen cometiendo los mismos errores de siempre, pero el monoplaza parece bastante inferior al de sus más cercanos rivales. A eso tenemos que sumarle el plus de Romain Grosjean, que hasta la fecha no ha dado señales de vida, y la pérdida de su principal sponsor Rich Energy. A perro flaco todo son pulgas, y los de Steiner no están par soportar muchas meteduras de pata más, por lo que no sería de extrañar que empezasen a rodar cabezas.

     Racing Point: no se les puede pedir más, después del via crucis y todos los apuros por los que pasaron en el renombrado equipo Force India, que no tuvieron recursos para evolucionar el monoplaza de la actual campaña, no se les puede pedir más. Después de que Lawrence Stroll, salvase al equipo sobre la campana, la situación en Racing Point es distinta, ahora el dinero no es problema, ya que se esta invirtiendo en una nueva sede con todo tipo de lujos, y aumentando la plantilla del equipo. Parece complicado que en lo que queda de año sean capaces de poner la situación más de cara, pero si hay algún equipo en la parrilla capaz de hacerlo son ellos. Su dupla de pilotos no esta funcionando mal, teniendo en cuneta que no tienen el arma idónea, pese a ello no estoy del todo satisfecho ni con Lance ni con Pérez.

     Alfa Romeo: la renombrada escudería Sauber al igual que otros de los equipos de la actual parrilla ha mostrado un rendimiento muy dispar en cuanto a sus pilotos, ya que con el mismo coche Kimi Raikkonen atesora 31 puntos, mientras su compañero Antonio Giovinazzi solo 1.  Pese a todo, la sensación que me deja este equipo después de más de media temporada es muy positiva, ya que continúan ascendiendo después de pasar por momentos muy delicados entre 2014 y 2017.

       Renault: situación extraña por la que han pasado los franceses en estas 12 carreras que se han disputado. Los de Cyril Abiteboul comenzaron la temporada de forma horrible, a la altura del GP de España solo contaban con 12 puntos, además arrastraban muchos problemas de fiabilidad que con el paso de las carreras han sido capaces de solventar. Es cierto que con el trascurso de las carreras han conseguido fortalecerse y recuperar cierto estatus dentro de las marcas de la zona media. En general mala temporada de los franceses, que necesitan dar a su potente dupla de pilotos un coche con el que puedan demostrar su valía. Es evidente que con respecto a la temporada pasada el Renault ha dado un paso hacia tras, pero el equipo ya está trabajando para recuperarse de este paso en falso y volver a colocarse entre la elite de la zona media.

Toro Rosso: excelente rendimiento del pequeño de las bebidas energéticas, que este año contaban con más componentes del Red Bull del año anterior que ningún otro. Los italianos contaban para esta temporada con una nueva dupla de pilotos respecto a 2018, que parece haber funcionado a la perfección. La eficiencia de todo el equipo se ha visto recompensada con 43 puntos y un quinto puesto en el mundial de constructores. Evidentemente no estirarían ahí de no haber sido por el accidentado GP de Alemania, en el que fueron los grandes vencedores, llevándose 23 puntos en total, y el segundo podio de su historia. De cara a esta segunda mitad de temporada contaran con una importante modificación pierden a Alexander Albon, a cambio de recuperar a Pierre Gasly.

McLaren: en lo que a resurrecciones se refiere, el equipo McLaren se lleva el premio en esta temporada, todo les sonríe, un monoplaza en condiciones, una directiva competente, un Carlos Sainz que lidera que da gusto, y un Lando Norris que ilusiona. Por primera vez desde 2013 o incluso 2012 los de Woking tienen motivos para alegrarse, y esa actitud positiva del equipo le reporta aún más beneficios de rendimiento. Es ilusionante ver como la papaya mecánica avanza en la dirección correcta y con un plan de ruta estructurado. Actualmente son cuartos en constructores, Carlos es 7º, y Lando 9º. Sin embargo, aun queda mucho camino por delante, McLaren es la segunda escudería más laureada de la historia de la Fórmula 1, y no puede permitirse esta sequia de 7 años sin ganar, por lo que han de seguir trabajando y esforzándose por recuperar ese estatus.

Red Bull: en la escudería austriaca volvemos a encontrarnos con un caso de rendimiento muy dispar entre sus pilotos: por un lado, Gasly ha protagonizado la mayor dececión d la temporada, y por otro su compañero Max Verstappen ha conquistado dos victorias y amenaza seriamente a Bottas, que ocupa el segundo lugar en el campeonato, con un coche muy superior al Red Bull. En cualquier caso, y pese a Gasly, el rendimiento del equipo de Horner es bastante positivo, teniendo en cuenta la revolución que ha supuesto el cambio de motor de Renault a Honda, si bien es evidente que el motor nipón parece ser ya algo más competitivo que el francés, cualquier cambio de marca supone una prueba de fuego para todo el quipo de ingenieros encabezado por Adrian Newey. Además, viendo como han mejorado su monoplaza desde Melbourne y las evoluciones de motor que Honda tiene previstas, todo parece indicar que de aquí a final de año pueden aspirar a más, y quien sabe en 2020…

Ferrari: porca miseria. Otro año más decepcionante, tras un 2018 en el que pudieron hacerse con los dos títulos este 2019 no ganan para disgustos. Un coche que no comprenden, una estrella a la deriva y una joven promesa que aun tiene mucho que aprender. Estas son las armas de los de rojo este año para al menos llevarse una victoria y de alguna manera “salvar la temporada”, aunque creo que la triste imagen que dan a sus seguidores no se podrá ver compensada con un “misero triunfo”. Hasta la fecha atesoran varios podios y 3 poles, que no han conseguido convertir en victoria. La frase que ya resuena en Maranello y a la que ya estamos acostumbrados es “el año que viene será nuestro año”; ojalá sea cierto, por el bien del automovilismo. Con la fe perdida en esta campaña, el equipo más laureado de la historia de la F1 ya centra sus esfuerzos en el diseño del próximo año, esperemos que sacrificando esta temporada podamos verlos renacer en 2020.

      Mercedes: intocables. Simplemente están a otro nivel, no hay nada que hacer. Tras un 2018 en el que sufrieron para llevarse el gato al agua. Este año no hay quien les tosa, ni a ellos ni a Hamilton, cuyo único rival es su compañero Bottas pero este desde Bakú se ha limitado a seguir su estela. No sabemos donde está el secreto de su rendimeinto pero es evidente que el bajo nivel de Ferrari ha contribuido a que los alemanes mantengan el monopolio al que nos tienen acostumbrados. Tan solo Verstappen les ha robado un par de victorias que realmente no les hacen falta para mantenerse como lideres indiscutibles de constructores. Con el cambio de normativa que habrá en 2021, los de Toto Wolf están a una temporada de conquistar todos los campeonatos de una “era”, que comenzó en 2014.